jueves, 25 de julio de 2013

La Al-qasaba de Málaga قصبة

La Alcazaba de Málaga se construye partiendo de un núcleo central, al contrario que otras construcciones islámicas.
Una de las principales características de la Alcazaba de Málaga es que está construida sobre el teatro romano, que data del siglo I, y cuyos elementos fueron expropiados para la construcción de la Alcazaba.

Este teatro romano se caracteriza por la utilización del desnivel del terreno para su construcción, lo cual era característico de los teatros griegos.
El teatro se descubrió en 1951 en la plantación de unos árboles en el patio de la Alcazaba, tras la aparición del adytus maximus.

La Alcazaba de Málaga es una fortificación militar-palaciega situada en la parte baja del monte de Gibralfaro, y se une a él por la coracha.

La Alcazaba comenzó a construirse en 1025 por orden de Yahya Ibn Ali, comenzando por la parte palaciega de la fortaleza.

Las entradas en recodo son típicas de las construcciones islámicas, en esta construcción vemos la primera entrada en recodo, y tras ella la de la bóveda vaída, que también es en recodo.

Encontramos ciertos elementos traídos del teatro romano, y que serán depositados en el museo de la aduana cuando finalice su construcción.
La cuesta y la puerta del cristo son una de las zonas de la construcción más conocidas, y más reconstruidas, ya que era una de las calles principales de la articulación del barrio de viviendas.
En la hornacina de la puerta se encontraba un cristo y un retablo, de ahí el nombre del acceso, el cristo todavía se puede visitar en churriana, y el retablo en el museo del obispado.
 

Tras la entrada en recodo de la puerta del cristo nos encontramos de frente con un antiguo silos deconstruido, en cuyo hueco vemos una virgen que se trajo de la calle Print y que data del siglo XVIII.
[Foto de la cuesta del cristo durante la ocupación del barrio de viviendas]
La puerta de los cuartos de granada se reconstruyó desde los cimientos en 1939, y por ella empezó la reconstrucción de la fortaleza.

Como elemento a destacar también encontramos la fuente del pez, del siglo XVIII, y un baño romano realizado en una sola pieza y que pesa unos 1500 kilos.

Tras el abandono de los árabes de la fortaleza en el siglo XV y tras la reconquista hasta el siglo XVIII, el edificio estuvo ocupado, y se sabe que estuvo en buen estado de conservación hasta finales del siglo XVII.
Tras el abandono de la fortaleza militar su estado fue en decadencia hasta los años 30 del siglo XX en los que comenzó la reconstrucción del barrio y de los elementos añadidos durante el abandono. Uno de los principales investigadores y precursores de los cambios de la alcazaba fue Juan Temboury, y se puede decir que a él le debemos el estado actual de la fortaleza, aunque su reconstrucción sea en unas partes muy fiel, y en otras un tanto ilusoria. [Foto del antiguo barrio, hoy cerrado al público]

Fragmento del poema “Mi Málaga la bella” de Salvador Rueda.
“Málaga es “inglesa” y mora
a la vez que es andaluza;
Guadalmedina la cruza
y el Puerto la condecora;
Gibralfaro la avalora
y la Caleta sin par;
la emblanquece su Azahar
y la dora su alegría;
en su torre se abre el día
y a sus pies se rompe el mar.”

domingo, 21 de julio de 2013

Julio Romero de Torres, la mujer andaluza.

Julio Romero de Torres nació en Córdoba en 1874, con una fuerte influencia de la Córdoba flamenca de los cafés cantantes.
Sus obras se codean con los cantes y los escritos de muchos artistas, como Salvador Rueda.
Se puede hacer un símil con un fragmento de un poema de Bécquer en el pasaje de la Venta de los Gatos:
Compañero del alma,
Mira qué bonita era,
Se parecía a la virgen
De Consolación de Utrera.
La obra en cuestión se llama "Mira qué bonita era" realizada en 1895, en ella vemos una escena cotidiana, un velatorio de una joven, que nos transmite dulzura y dolor.
Él mismo se representa en el centro, detrás del ataúd. El novio de la joven llora desconsolado en primer plano pisando con la silla la sábana que cubre el lecho de la joven, y que se convierte en una prolongación del cabello de la mujer.
Representa un ambiente castizo, un velatorio de pueblo, con flores que han caído encima de la joven como juventud perdida de la mujer.
También podemos destacar otro fragmento de un poema de G. A. Bécquer.
Despertaba el día
Y a su albor primero,
Con sus mil ruidos
Despertaba el pueblo.
Ante aquel contraste
De vida y misterios,
De luz y tinieblas,
medité un momento:
¡Dios mío, qué solos
Se quedan los muertos!

Esta obra recoge, para mí, las temáticas principales de la obra pictórica de Julio Romero de Torres, la mujer, la muerte, el dolor dulce, y la luz de Andalucía.
 
Otra de las obras más destacadas de Julio, y que más controversia tuvo fue Mal de amores, realizada hacia 1905, en la que vemos plasmadas las tres edades de la mujer.

Ante la oscuridad del rostro de la mujer devastada por un desengaño amoroso, vemos un tono blanquecino, muy común en la obra de Julio, en el vestido de la niña, que desprende la inocencia de la primera etapa de la vida.

La señora sentada, en una típica silla andaluza, representa la tranquilidad y la dulzura de las personas mayores.

Por último destacar la luz que desprende ese patio, a contraluz con el rostro oscuro de la mujer apoyada en el quicio, ese patio que encontramos en otras obras de Julio, y que se trata del patio de su casa, qué mejor patio andaluz para representar en un cuadro que el suyo propio.

Visita virtual a la exposición de Julio Romero de Torres

¿Qué busca representar Julio en sus cuadros? La mujer andaluza, la luz clara y alegre de su Córdoba natal, el flamenco, los tonos blancos de los patios y las casas, la muerte, la juventud, los desnudos ornamentados con algún abalorio.
Representa Andalucía, su luz, sus mujeres, su música.